Existe un método claro para saber que un caballo se va a disponer a morder de un momento a otro. Lo sabrá siempre que observe que el animal realiza estos gestos:
* Levanta una pata anterior, dejándola ligeramente suspendida.
* Baja las orejas.
* Estira el cuello.
Se trata algo así como de una advertencia que puede realizar tanto a personas como a otros caballos.
Por lo general el caballo que realiza este tipo de actitudes es un caballo tranquilo y serio, puesto que si no fuera así no daría señales previas; efectivamente un caballo agresivo y con tendencia a morder se lanzará directamente, sin dar opción a que nos preguntemos lo que está haciendo; como mucho puede realizar los gestos antes señalados pero de una forma mucho más rápida y sin dar tiempo para la reacción.
El caballo que realiza estos gestos realmente no quiere morder, sólo actúa así como advertencia, para que le dejen en paz.
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